La anfitriona amable y atenta. El desayuno delicioso y casero. La decoración de la casa bonita y acogedora. Ubicación céntrica y conveniente. El pueblo de Brihuega encantador. La limpieza impecable. El patio y jardín ideales para relajarse. La tranquilidad y ausencia de ruido.

No he tenido ningún problema.

Nos encantó la amabilidad de Rosa y su atención excepcional. La casa es acogedora y está muy limpia, con habitaciones espaciosas y bien equipadas. El acceso al salón y la cocina es libre y puedes disfrutar de la tranquilidad y la temperatura agradable de la noche durmiendo con las ventanas abiertas.

Nos sentimos bien acogidos, no tenemos ninguna queja.

Me encantó mi estancia en este hotel. Los mejores aspectos fueron la limpieza impecable de las habitaciones, la amabilidad del personal y la ubicación perfecta en el centro de esta hermosa ciudad. Además, las instalaciones del hotel eran excelentes y todo estaba bien cuidado. había estacionamiento disponible, lo cual fue muy conveniente.

No puedo encontrar nada negativo que decir sobre esta experiencia. De verdad no hay nada que no me haya gustado.

A pesar de estos pequeños inconvenientes, mi experiencia en este lugar fue muy positiva y lo recomendaría a cualquiera que esté buscando un alojamiento acogedor y bien ubicado.

Me encantó mi estadía durante la Navidad en este encantador lugar. Lo mejor fue la hospitalidad y amabilidad del personal, quienes te hacen sentir como en casa desde el primer momento.

El lugar tiene una ubicación ideal, cerca de todo y se puede llegar a pie rápidamente. Además, las habitaciones son amplias y cómodas, con baños limpios y bien equipados. El desayuno es abundante y delicioso, con croissants recién horneados. hay una terraza tranquila donde se puede disfrutar de momentos de paz.

El único inconveniente es que la cama puede ser un poco blanda para algunos gustos.

Desde el momento en que llegué, me sentí bienvenido. La dueña, Rosa, fue muy amable y el trato que recibí fue excepcional. La limpieza del lugar también fue impecable, lo cual es algo que aprecio mucho al viajar.

La limpieza de la casa es impecable, y la propietaria, Rosa, es una mujer encantadora. La ubicación es perfecta, a solo unos pasos del centro del pueblo pero en una zona tranquila. La casa tiene todo lo necesario para una estancia perfecta. Definitivamente recomendaría Casa Rural Blas a cualquier viajero que visite Brihuega.

Habitaciones amplias y bien decoradas. Camas cómodas. Salón común. Desayuno incluido. Buena ubicación. Fácil aparcamiento. Atención amable de la propietaria.

Que no pude quedarme más tiempo.

la casa rural Blas en Brihuega fue una experiencia increíble. Rosa, la propietaria, fue muy amable y atenta. La habitación grande y bonita, con un balcón precioso y camas cómodas. El desayuno delicioso y abundante, con croissants buenísimos. Nos encantó disfrutar del jacuzzi con productos de lavanda del pueblo.

el jacuzzi estaba estropeado.